En esta entrada voy a dar mi opinión personal sobre la Eutanasia y el caso de Ramón Sampedro.
La eutanasia es la acción que acelera la muerte de un
paciente desahuciado con la intención de evitar sufrimientos. El concepto está
asociado a la muerte sin sufrimiento físico.
Existen dos tipos de
eutanasia, la directa que es aquella
que consiste en adelantar la muerte de una persona que tiene una enfermedad
incurable y la indirecta que lo que
hace es paliar el dolor y se suministran una serie de medicamentos para ello
que como consecuencia no intencionada pueden producir la muerte.
Ramón Sampedro fue
un marino y escritor español aquejado de una tetraplejia
postraumática al zambullirse y darse un golpe con una roca en el mar que le
supuso la inmovilidad total del cuerpo a excepción de la cabeza.
Desarrolló una intensa actividad de petición
judicial para poder solicitar el suicidio asistido, y que la persona o personas que le auxiliasen
no incurriesen en delito dado que su estado lo incapacitaba para hacerlo sin
ayuda externa
.
Ramón murió en 1998 por envenenamiento de
cianuro potásico, ayudado por su amiga Ramona Maneiro. Ésta fue detenida días después pero no fue
juzgada por falta de pruebas.
Siete años después, una vez que el delito hubo
prescrito, Ramona admitió en televisión haber facilitado a Ramón el acceso al
veneno que le causó la muerte y haber grabado el vídeo donde éste pronunció sus
últimas palabras.
Desde entoces y hace ya
veinte años de esto el Código Penal tipifica como delito tanto la eutanasia
como el suicidio asistido. El artículo 143.4 castiga a quienes ayuden a morir a
otro, aunque la petición sea consciente, reflexionada y reiterada, y expresada
por una persona con dolencias irreversibles que le causen sufrimiento.
Yo pienso que la eutanasia
es quitarse o quitar la vida, igual que un asesinato o un suicidio, aunque
entiendo que haya gente con muchos dolores que sea incapaz de aguantar el
sufrimiento y dolor y pida desesperadamente morir. Creo que la vida nos la da
Dios y el billete de vuelta solo nos lo puede dar él.
Hay que vivir la vida
adaptándonos a los problemas que podamos tener y siempre pensar que por algún
motivo o por alguna misión estamos aquí, es muy egoísta decidir por uno mismo
cuando tenemos que morir y más cuando tiene que morir otra persona porque los
milagros existen y sólo Dios sabe lo que va a pasar aunque lo veamos muy claro.
Si algún día la eutanasia se
hace legal supongo que será para casos muy especiales y muy estudiados y creo
que para una persona cristiana nunca será la solución.
